viernes, 16 de marzo de 2012

*16

Recordando momentos con David, momentos inolvidables, agarrados de la mano dejando que la brisa de la noche roce suavemente nuestra piel,  dándonos uno que otro beso. Todo era perfecto, hasta parecía que el también lo era...
Caminamos juntos por la calle, cogidos de la mano aunque nada sea como antes, intentamos que lo sea.
-Un anillo precioso! -exclama una chica en la calle sonriendo a su novio, prometiéndose así la eternidad de su amor, un brillante anillo de oro blanco.
-¿Hola? ¡Oye, tu! -Hago el gesto de girarme sin saber ciertamente si me llaman a mi, a su vez se gira David también- ¡Si tu! Eres tu.
-¿Soy yo que? -Una cara de desconcertada totalmente se dibuja en mi rostro.
-Has ganado. Prometí a mi amigo, aquel de ahí -señalando a un chico con una apariencia un tanto callejera, pelo negro y poco mas se puede ver desde mi lugar- que la primera chica preciosa debía merecer estas entradas que nos han regalado en la radio, ¿Las aceptas? -por primera vez desde que estamos hablando, le miro fijamente a los ojos y disimuladamente miro las entradas casi sin darles importancia. David me mira y lo mira a el.
-Oye chico, los dos sabemos que es preciosa pero si lo que quieres es ligar con ella, llevamos once meses juntos, te agradecería que no intentaras meterte entre nosotros. -contesta David un tanto celoso. No suele ser celoso pero por el momento en el que pasamos... Estamos colgando un hilo y tiene mucho miedo de perderme.
-No, no, tranquilo, no pretendo ligar con nadie, simplemente cumplo mi parte de la apuesta. -vuelve a mirarme y yo miro mas detalladamente las entradas que lleva en la mano.
-¿¡Maldita Nerea!? -exclamé dando un salto de alegría- ¡Mi grupo favorito! Llevo meses ahorrando para esas entradas...
-Pues da la casualidad de que ya no tienes que ahorrar mas, ahora te las doy yo.
-¿Y porque todo esto? Simplemente somos dos desconocidos que llevamos hablando desde hace solo dos minutos y resulta que me estas regalando unas entradas de mi grupo favorito... -no entiendo nada, me pongo seria por momentos intentando disimular mi felicidad al saber que ya tengo lo que llevo esperando seis meses, mis entradas.
-Todo esto no ha empezado hace dos minutos, poco a poco iras descubriendo el porque, de momento te pido que te lleves las entradas, gracias. -se fue dejando un gran desconcierto dentro de mi. 
Despues de quedarme cuatro minutos parada en el mismo lugar, mirando fijamente como desaparece junto a su amigo, David me hace volver en sí y continuamos nuestro camino. Dudando unos segundos sin acordarme donde íbamos. 
-Cariño, vamos a tomar algo a aquel bar, me ha entrado hambre.
-Déjame ver estas entradas amor, ha sido todo muy raro.
Me cogio las entradas de la mano y se las fue mirando hasta llegar al bar, nos sentamos en la primera mesa libre que vimos y esperamos a que nos atendieran.
-¿Has pensado ya con quien iras?
Aun estaba pensando en lo que había ocurrido y seguía mirando aquel lugar donde había pasado todo, esta vez sentada en el bar. Se me iluminaron los ojos.
-¿Te gustaría venir conmigo? Hace mucho que no hacemos cosas juntos, todo es muy aburrido últimamente... ¡Ven, lo pasaremos bien, sera una experiencia inolvidable! 
Dudo durante unos instantes, miro la fecha del concierto. Trece de diciembre, aun quedan nueve meses.
-Iré contigo pequeña, pero tu mañana debes venir a verme al partido. Es por la mañana, a las once. ¡No te duermas!
Hice una pequeña sonrisa de pillina.
-Iré mañana a verte grandullon, prometo no dormirme.
Nos besamos y justo en ese momento llego nuestra comida. Un bocata de jamón y queso, un mini de lomo y dos cacaolats. Al acabar me llevo a casa.





No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.